En el plazo de cinco días hemos recibido la dolorosa noticia de la muerte de Teresa Setien Piedra (7 de marzo) y Agustin Eskubi Urtiaga (12 de marzo).
Teresa Setién perdió a su padre en el bombardeo del 31 de marzo de 1937, asesinado por la aviación fascista. No fue la única pérdida que sufrió la familia en el contexto de la sublevación militar.
El hermano de Agustín Eskubi, Juan Eskubi, fue fusilado por los fascistas en el cementerio de Derio. Agustín huyó como muchos otros niños a Inglaterra y allí vivió hasta su fallecimiento.
Teresa Setién Piedra (Durango 1925-2018)
Tal y como narró en la entrevista a Durango 1936 Teresa Setién Piedra perdió a su padre, Hilario Setién, en el bombardeo del 31 de marzo de 1937. La aviación fascista acabó con su vida en la calle Kurutziaga. Su madrina, Tiburcia Larrañaga también fallecería a causa de las graves heridas sufridas en el bombardeo. Un primo, Generoso Setién Ortiz (Batallón Fulgencio Mateos) también falleció en el frente de Markina, en el monte Aiuste, por alcance de obús el 10 de octubre de 1936. Su hermano Manolo sufrió la cárcel y la represión posterior.
Tanto su madre como Teresa tuvieron que trabajar duro para sacar adelante la familia en una posguerra franquista que no les concedió ayuda ninguna. La historia de Teresa es la historia de una generación de mujeres que luchó toda su vida por su familia.
(Entrevista a Teresa Setién Piedra)
Agustín Eskubi Urtiaga (Durango 1922-Inglaterra 2018)
Agustín Eskubi Urtiaga llegó a Inglaterra en uno de los muchos barcos que partieron repletos de niños y niñas hacia el exilio en la primavera-verano de 1937. A pesar de que era joven, Agustín conoció de primera mano los avatares de la guerra. Fue testigo directo del bomardeo de Durango. Su hermano, Juan Eskubi, miembro de STV y ANV y responsable de la junta de defensa de Durango, fue detenido y fusilado por los fascistas en el cementerio de Derio el 24 de octubre de 1938.
Agustín vivió en Inglaterra desde entonces y allí ha fallecido este 12 de marzo.
(entrevista a Agustín Eskubi Urtiaga)
Que la tierra les sea leve a ambos.